Hoy de verdad es un día memorable. En 1992 en Sudáfrica hay un proceso de respaldo a las reformas propuestas por el presidente F. W. de Klerk, respaldadas por el 69% de electores BLANCOS (ojo). Estas reformas incluyen la derogación de las leyes de discriminación racial, el famoso Apartheid, que a partir de entonces comienza a desmatelarse. Al año siguiente de Klerk acuerda con el CNA, el partido de Nelson Mandela, hacer un gobierno de transición con la celebración para el '94 de elecciones presidenciales libres. Todo el proceso en conjunto les hace recibir a ambos el Nobel de la Paz.
¡Que poca madre! Los blanquitos colonialistas (ojo, solo estoy hablando de los estupidos colonialistas, y no de los blancos en general -y ¡menos aun de las blancas! ¡woooow!- aún se sienten dueños del mundo. Hay que demostrarles que cuando mucho son dueños de su casa.
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| Klerk y Mandela al final del Apartheid |
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